Richard Branson se convirtió en la primera persona en viajar al espacio a bordo de un cohete que ayudó a financiar. El avión espacial supersónico desarrollado por su empresa, Virgin Galactic, surcó el cielo de Nuevo México a primera hora del domingo, llevando a Branson y a tres compañeros de tripulación.
Branson, junto con los empleados de Virgin Galactic Beth Moses, Colin Bennett y Sirisha Bandla, y los pilotos Dave Mackay y Michael Masucci, subieron al SpaceShipTwo, un avión con alas y un único motor de cohete que la empresa ha dedicado casi dos décadas a desarrollar, antes del amanecer. Acoplado a su enorme nave nodriza de doble fuselaje, apodada WhiteKnightTwo, el vehículo surcó los cielos a las 8:30 am MT y ascendió a unos 15500 metros de altura.
A 45 minutos del despegue, la SpaceShipTwo se desprendió de su nave nodriza y descendió momentáneamente antes de que su motor se encendiera y el vehículo se elevara en un a subida recta para la segunda etapa de su ascenso. A bordo, los pasajeros experimentaron hasta tres Gs de fuerza por el estallido de la aceleración extrema y vieron cómo el cielo azul se desvanecía en la oscuridad moteada de estrellas del espacio exterior. En la cima de la trayectoria de vuelo, a más de 80 kilómetros de altura, el vehículo quedó suspendido en ingravidez durante unos minutos, lo que permitió a los pasajeros disfrutar de vistas panorámicas de la Tierra y el espacio mientras la SpaceShipTwo se volteaba sobre su vientre. A continuación, ajustó sus alas hacia arriba para la reentrada y luego las reajustó en la posición de un avión convencional mientras volaba de nuevo hacia la atmósfera y planear hasta aterrizar en la pista.
Mientras Branson flotaba en la microgravedad, grabó un mensaje con las cámaras a bordo del avión espacial: «A todos los niños de ahí fuera: una vez fui un niño con un sueño, mirando a las estrellas. Ahora soy un adulto en una nave espacial… Si nosotros podemos hacer esto, imagínense lo que ustedes pueden hacer», dijo.
"To all you kids down there…" – @RichardBranson's message from zero gravity. #Unity22
Watch the livestream: https://t.co/5UalYT7Hjb pic.twitter.com/lYXHNsDQcU
— Virgin Galactic (@virgingalactic) July 11, 2021
Este vuelo fue el cuarto de prueba del vehículo que llegó al borde del espacio.
Alrededor del despegue de la SpaceShipTwo hubo, como es típico en Branson, una fiesta de gran producción con la asistencia de amigos, familiares, empleados y algunas personalidades.
El vuelo de Branson, que se produce sólo nueve días antes de que el multimillonario de Amazon, Jeff Bezos, se lance al espacio suborbital a bordo de la nave de su propia compañía, es un momento histórico para la industria espacial comercial. Este sector, en pleno auge, lleva años tratando de convertir el turismo espacial suborbital (un vuelo relativamente sencillo de ida y vuelta, en lugar de orbitar la Tierra durante periodos más largos) en un negocio viable, con el objetivo de permitir que miles de personas experimenten la adrenalina y las amplias vistas de nuestro planeta que pueden ofrecer estos vuelos.
Branson y Bezos están situados para convertirse en competidores directos en esa industria, ofreciendo cada uno de ellos billetes a clientes adinerados para breves viajes a la atmósfera superior a bordo de naves espaciales supersónicas impulsadas por cohetes.
Virgin Galactic tiene previsto realizar sólo un vuelo de prueba más antes de empezar a volar con clientes de pago. Hasta ahora, más de 600 personas han reservado billetes por un precio de entre 200.000 y 250.000 dólares. Se espera que la empresa reabra pronto la venta de pasajes suborbitales, aunque a un precio más elevado.
El vuelo de Branson también ayuda a reforzar la reputación de Virgin Galactic como la «primera línea espacial comercial del mundo». Así es como se anuncia la empresa al inscribir a los cientos de clientes que han esperado los retrasos en el desarrollo y un trágico percance, para tener la oportunidad de viajar a bordo de la SpaceShipTwo.
Pero aún no está claro si Virgin Galactic será realmente la «primera» compañía espacial suborbital comercialmente operativa.
Redacción CambioDigital OnLine
