Utilizar algoritmos de inteligencia artificial como ChatGtp u otros sistemas capaces de generar imágenes o mensajes de audio para crear mensajes ocultos imposibles, o casi, de detectar.
Fue un grupo de investigadores de la Universidad de Oxford y de Carnegie Mellon el que planteó la hipótesis de esta técnica, que podría ser útil, por ejemplo, a disidentes en regímenes autoritarios donde incluso las redes sociales están bajo estricto control, y que será presentada en la Conferencia Internacional sobre Aprendizaje de Representaciones.
«Es un uso innovador, a través de la IA, de una técnica antigua, la llamada esteganografía, que consiste en pocas palabras en ocultar un mensaje en otro contenido, ya sea un texto o una imagen», explicó a Massimiliano Sala, director del Laboratorio de Criptografía de la Universidad de Trento. Conocida desde la antigüedad, es famosa, por ejemplo, una historia sobre el uso de la esteganografía durante una de las guerras entre griegos y persas en la que se tatuó un mensaje en la cabeza rapada de un sirviente persa: una vez que al sirviente le volvió a crecer el pelo, partió en su misión y una vez en su destino se lo rapó para mostrar el mensaje. Más recientemente, las técnicas de esteganografía también han sido utilizadas, por ejemplo, por Isis, ocultando información en vídeos o fotos, pero su uso real ha sido muy limitado.
«Los investigadores proponen ahora un uso bastante innovador de la misma, aunque con muchas limitaciones en su uso real. La idea», explica Sala, «es explotar tecnologías muy complejas que ahora están al alcance de todos, como los distintos algoritmos de IA, para ocultar mensajes de forma eficiente. Un ejemplo trivial es el de un texto en el que las primeras letras de cada palabra forman una frase. De forma mucho más compleja, un mensaje por correo electrónico o una voz en whatsapp podrían así, por ejemplo, pasar fácilmente los controles de un censor y llegar al destinatario sin que el controlador reconozca el peligro. Se trata sin duda de un paso importante en el uso de la IA en la criptografía, que podría cambiar radicalmente en los próximos años, precisamente por la llegada de estos algoritmos», concluye Sala.
Fuente: Web. Editado por CambioDigital OnLine