Recurrir a los robots para remediar la escasez de mano de obra en la hostelería puede resultar un bumerán: la mayor presencia de tecnología automatizada aumenta el estrés y la inseguridad de los trabajadores, tanto empleados como directivos, reforzando su intención de marcharse cuanto antes.
Así lo demuestra un estudio de la Universidad Estatal de Washington publicado en la revista International Journal of Contemporary Hospitality Management.
Los investigadores dirigidos por Bamboo Chen decidieron no centrarse en el impacto que los robots tienen en los clientes con los que interactúan, sino en los trabajadores empleados en el propio negocio hostelero. Para ello entrevistaron a 321 empleados de hostelería y 308 de servicios de comida en Estados Unidos para evaluar su relación con una amplia gama de tecnologías, desde camareros robot y brazos robóticos hasta quioscos automáticos de autoservicio y dispositivos digitales para pedir mesa.
Los resultados muestran que las personas que desconfían más de los robots experimentan con más frecuencia inseguridad laboral y estrés, estados de ánimo que luego se correlacionan con la intención de abandonar el trabajo. Estos temores no disminuyen ni siquiera cuando se familiarizan con los robots; al contrario, los empleados que trabajan más estrechamente con tecnologías robóticas temen más que se les considere obsoletos y que se les sustituya. También influye la propia percepción de las capacidades de los robots: quienes piensan que estas tecnologías son más capaces y eficientes tienden a estar más dispuestos a dejar su trabajo.
A la luz de estos datos, los autores del estudio recomiendan que los empresarios insistan siempre en el papel de los trabajadores humanos y les comuniquen no sólo las ventajas, sino también las limitaciones de las nuevas tecnologías.
Fuente: Web. Editado por CambioDigital OnLine