Recientemente Alphabet, matriz de Google, comunicó un acuerdo definitivo para adquirir Intersect, empresa especializada en proyectos de energía limpia e infraestructura de centros de datos, por 4.750 millones de dólares en efectivo, además de la asunción de deuda existente. La operación, que se espera cerrar en la primera mitad de 2026, responde a la creciente presión sobre las redes eléctricas estadounidenses derivada del auge de la inteligencia artificial y la expansión de servicios en la nube.
Intersect desarrolla proyectos que combinan generación eléctrica y capacidad de cómputo en un mismo emplazamiento, lo que permite reducir tiempos de conexión a la red y mitigar cuellos de botella en la transmisión. Entre los activos incluidos en la transacción figuran varios gigavatios de proyectos energéticos y de centros de datos en desarrollo o construcción, fruto de la colaboración previa con Google. Uno de los más destacados es el complejo co-ubicado en Haskell County, Texas, que integrará generación renovable y capacidad de procesamiento.
La compañía adquirida mantendrá su marca y liderazgo bajo la dirección de su fundador y director ejecutivo, Sheldon Kimber, aunque trabajará estrechamente con el equipo de infraestructura técnica de Google. No obstante, algunos activos operativos en Texas y California quedarán fuera del acuerdo y seguirán gestionados por los inversores actuales, como TPG Rise Climate y Climate Adaptive Infrastructure.
El anuncio se enmarca en un contexto de creciente demanda energética: los centros de datos consumen actualmente alrededor del 6% de la electricidad en EE. UU., y estimaciones de Goldman Sachs prevén que esa proporción podría alcanzar el 11% hacia 2030 debido a la expansión de cargas de trabajo de IA. Organismos reguladores como la North American Electric Reliability Corporation han advertido que el rápido crecimiento de estas instalaciones incrementa el riesgo de tensiones en la red y posibles apagones durante picos de demandaInsider.
Sundar Pichai, director ejecutivo de Alphabet y Google, señaló que la adquisición permitirá “operar con mayor agilidad en la construcción de nueva generación eléctrica en paralelo con la carga de los centros de datos” y contribuirá a “reimaginar soluciones energéticas que impulsen la innovación en Estados Unidos”. Kimber, por su parte, destacó que la infraestructura moderna es “clave para la competitividad estadounidense en inteligencia artificial” y que la inversión conjunta refuerza la visión de integrar innovación energética y compromiso comunitario.
Alphabet ya poseía una participación minoritaria en Intersect desde una ronda de financiación de 800 millones de dólares en 2024. Con esta compra, la compañía avanza hacia un modelo de “soberanía energética”, en el que no solo adquiere electricidad, sino que controla directamente el desarrollo de proyectos de generación. Esta estrategia busca garantizar un suministro abundante y asequible para sus centros de datos, evitando trasladar costos adicionales a otros clientes de la red.
La operación refleja una tendencia más amplia en el sector tecnológico: grandes empresas como Amazon y Microsoft también han enfrentado dificultades para asegurar capacidad eléctrica y emplazamientos adecuados para sus centros de datos, en medio de una competencia creciente por recursos energéticos. En este escenario, la adquisición de Intersect posiciona a Alphabet con mayor control sobre su infraestructura crítica y su capacidad de expansión en inteligencia artificial
Fuente: Nota de Prensa Alphabet | Editado por CDOL
