Imagine explorar modelos interactivos en 3D de su propio cuerpo, creados a partir de resonancias magnéticas, tomografías computarizadas y angiogramas, para comprender mejor su enfermedad. Este escenario, antes confinado a la ciencia ficción, está a nuestro alcance gracias al uso de la Realidad Aumentada (RA) en la asistencia sanitaria.
El enfoque basado en la RA, que muestra el «arte de lo posible» antes de que el paciente se comprometa con un plan de tratamiento, refleja el creciente interés por una atención centrada en el paciente. Su importancia resulta evidente si tenemos en cuenta esta sombría estadística: cada año se producen tres millones de muertes en todo el mundo debido a una asistencia insegura.1 En este contexto, la RA presenta un enfoque novedoso e innovador para capacitar al paciente y mejorar los resultados del tratamiento.
La RA tiende un puente entre el mundo físico y el digital al crear experiencias inmersivas e interactivas que profundizan la implicación del paciente en su viaje sanitario. Las previsiones indican que el mercado sanitario de la RA crecerá de 1.600 millones de dólares en 2022 a más de 12.000 millones de dólares en 2031,2 por lo que es evidente que esta tecnología desempeñará un papel cada vez más crucial en el cuidado, la educación y el tratamiento de los pacientes.
El polifacético papel de la RA en la sanidad moderna
En la planificación y ejecución de intervenciones quirúrgicas, la realidad aumentada está ampliando los límites de lo posible. Por ejemplo, antes de entrar en el quirófano, los cirujanos pueden crear modelos digitales de las anatomías de los pacientes utilizando la RA, lo que les permite simular procedimientos y tomar decisiones críticas. Algunas empresas farmacéuticas han desarrollado incluso simulaciones digitales inmersivas para que los cirujanos practiquen inyecciones subretinianas de terapia génica ocular.
Esta planificación preoperatoria aumenta la precisión y mejora los resultados en los pacientes. En el quirófano, las superposiciones de RA pueden proporcionar a los cirujanos información crítica en tiempo real en su campo de visión, lo que ayudará a reducir las complicaciones. Los estudios sugieren que las cirugías asistidas por RA pueden reducir los errores hasta en un 40%, lo que mejora notablemente la seguridad del paciente.3
La RA está convirtiendo las complejas explicaciones médicas en visuales interactivas, lo que permite a los pacientes explorar su propia anatomía, ver cómo actúan los medicamentos dentro de su cuerpo y seguir paso a paso las guías para el cuidado en casa. Esta claridad fomenta el compromiso del paciente y la adherencia al tratamiento, lo cual es vital ya que, a nivel mundial, el cumplimiento total del tratamiento de enfermedades crónicas es sólo del 50%, con tasas aún más bajas en países en desarrollo como la India.4
Más allá de las cirugías, la RA también puede ayudar a identificar las venas de los pacientes para pruebas diagnósticas o extracciones de sangre. En oftalmología, la RA permite comparar los movimientos oculares de un paciente con simulaciones en 3D para detectar ciertas dolencias.
En el campo de la telemedicina, la RA tiende un puente entre la atención virtual y la presencial. Ofrece una forma de mejorar las consultas virtuales proporcionando ayudas visuales que pueden hacer más precisos los diagnósticos a distancia y más eficaces los planes de tratamiento. Esto es muy valioso para los pacientes de zonas rurales o desatendidas que no tienen fácil acceso a la atención médica especializada.
En una línea similar, imagine a su fisioterapeuta como un entrenador de alta tecnología, gracias a la RA. Proporciona información en tiempo real, ayudando a mantener la forma adecuada y a seguir los progresos, lo que mejora la eficacia de la terapia, especialmente en rehabilitación. En el tratamiento del dolor, la RA ofrece distracciones inmersivas para ayudar a los pacientes a sobrellevar el dolor crónico o las molestias durante los procedimientos, proporcionando una alternativa no farmacológica a los opiáceos.
Superar los retos y dar forma al futuro de la RA en la atención sanitaria
Aunque el potencial de la RA en la atención sanitaria es inmenso, su implantación con éxito en países como la India se enfrenta a varios retos infraestructurales. La conectividad de última milla sigue siendo un obstáculo, especialmente en las zonas rurales. Según un informe, el 93% de los usuarios urbanos acceden a Internet a diario, frente al 86% en las zonas rurales.5 Esto apunta a un problema más profundo: mientras que las principales ciudades de la India se benefician de las redes 4G y 5G emergentes, muchas zonas rurales luchan con conexiones estables y de alta velocidad, necesarias para experiencias de RA sin problemas.
Esta brecha de calidad afecta significativamente a la fiabilidad de los servicios de telemedicina basados en RA en las regiones donde podrían marcar la mayor diferencia.
Pero lo más alentador es que algunas soluciones innovadoras ya están causando sensación. Por ejemplo, este hospital oncológico financiado por el gobierno. Han encontrado una forma de utilizar la telemedicina basada en la RA para conectar a los especialistas en cáncer de la ciudad con los pacientes rurales. ¿El resultado? Han conseguido reducir a la mitad los costos de desplazamiento y en un 60% las citas perdidas. Es un ejemplo perfecto de cómo la realidad aumentada puede hacer maravillas si se aplica con cuidado.
Los sistemas de seguridad presentan otro reto crítico. Los datos sanitarios son confidenciales, y las aplicaciones de RA requieren medidas sólidas de cifrado y ciberseguridad. Mientras que los hospitales metropolitanos pueden contar con sofisticados protocolos de seguridad, los centros sanitarios más pequeños suelen carecer de recursos para los sistemas de protección de datos. Esto crea vulnerabilidades en la cadena de prestación de asistencia sanitaria, sobre todo cuando se manejan datos de pacientes en distintos lugares.
Aquí es donde intervienen los consultores expertos para colmar estas lagunas de implantación. Las empresas de consultoría tecnológica como ZS aportan una valiosa experiencia en la superación de retos tecnológicos e infraestructurales. Ayudan a las organizaciones sanitarias a desarrollar soluciones de RA a medida que funcionen dentro de las limitaciones de la infraestructura local, garantizando al mismo tiempo una sólida seguridad de los datos. Su enfoque integral incluye la aplicación de métodos de cifrado y controles de acceso sólidos, elementos integrales de la seguridad de los datos. Su enfoque integral incluye la aplicación de métodos de cifrado y controles de acceso sólidos, elementos integrales para unos servicios de telemedicina fiables. Al colaborar con organizaciones sanitarias en su adopción de la RA, ZS les ayuda a diferenciarse en un mercado competitivo, satisfaciendo las demandas de pacientes expertos en tecnología y atrayendo a una base de pacientes más amplia.
De cara al futuro, la integración de la RA con tecnologías avanzadas como la IA generativa y el análisis de macrodatos promete avances aún mayores. Los profesionales sanitarios podrían ofrecer planes de tratamiento personalizados basados en perfiles de salud individuales y datos en tiempo real. A medida que estas tecnologías maduren, la asistencia sanitaria estará cada vez más orientada a la predicción y al paciente. Es posible que pronto veamos asistentes de realidad aumentada con IA capaces de detectar y prevenir problemas de salud en una fase temprana. De hecho, el futuro de la RA en la sanidad marca el comienzo de una nueva era de la atención médica al reimaginar todo el proceso de atención al paciente, desde la prevención hasta el tratamiento y más allá.
Fuente WEB | Editado por CambioDigital OnLine
