El sector fintech está transformando el panorama financiero en América Latina, impulsando la banca en línea y, cada vez más, enfocándose en la concesión de crédito para fomentar una mayor inclusión financiera en toda la región.
Las fintechs redefinen los pagos y el crédito en la Región
Las tarjetas de débito ya han superado al efectivo como el principal método de pago en los países hispanohablantes de Latinoamérica, un cambio evidenciado por estudios de McKinsey. A medida que la región adopta la banca digital, las fintechs y otras instituciones no bancarias están expandiendo sus servicios más allá de los pagos, incursionando fuertemente en el ámbito de los préstamos.
El ecosistema fintech en América Latina ha experimentado un crecimiento notable, con un aumento del 340% en seis años, superando las 3.000 startups en 2023, según un informe del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y Finnovista. Países como Brasil, México y Colombia lideran esta expansión. Colombia, en particular, se ha consolidado como un centro regional, con casi 400 startups fintech activas en 2024.
La brecha y oportunidad del crédito
A pesar de que los préstamos representan el segmento más grande dentro del ecosistema fintech (28.4% de las empresas), su participación en el mercado crediticio global sigue siendo relativamente baja. Esta situación, sin embargo, representa una enorme oportunidad para impulsar la verdadera inclusión financiera.
Abdul Assal, Director de Desarrollo de Negocios para Brasil y Colombia, enfatiza que «sin la provisión de crédito asequible y accesible, la verdadera inclusión financiera nunca se logrará». El crédito, al ser transformador, permite a los consumidores mitigar riesgos y planificar su futuro, y las fintechs están en una posición única para ofrecerlo de manera relevante y asequible.
Desafíos y estrategias para la expansión crediticia
Las fintechs a menudo enfrentan obstáculos para acceder a los mismos fondos de capital y navegar las complejas regulaciones que benefician a los bancos tradicionales. No obstante, mediante alianzas innovadoras y el aprovechamiento de datos alternativos para una sólida evaluación de riesgos, pueden financiar a poblaciones que antes estaban desatendidas. Un ejemplo destacado es el neobanco brasileño Nu (Nubank), que ha alcanzado más de 114 millones de clientes globalmente al ofrecer productos crediticios de menor costo a consumidores no bancarizados. Su algoritmo de aprobación de crédito, por ejemplo, puede aprobar a aproximadamente el 40% de los clientes que no calificarían para crédito tradicional.
Las plataformas digitales ágiles de las fintechs y su capacidad para utilizar nuevas fuentes de datos las posicionan estratégicamente para atender a segmentos desatendidos, como microempresas y personas sin historial crediticio convencional. Áreas como las finanzas integradas y los productos de préstamo a medida ofrecen vías significativas para generar ingresos y, al mismo tiempo, cumplir la promesa de una inclusión financiera integral.
Para capitalizar plenamente esta oportunidad, será esencial la colaboración continua entre innovadores, inversores y reguladores, creando un ecosistema donde el crédito sea tan accesible y eficiente como lo han sido los pagos digitales.
Fuente: Galileo Financial Technologies