Una contraseña estándar de ocho caracteres puede descifrarse en segundos. La introducción de una letra mayúscula supone 22 minutos más de trabajo para los ciberdelincuentes. En cambio, añadir un carácter especial combinado con una mayúscula requiere una hora escasa de trabajo.
Estas indicaciones proceden de la web security.org con motivo del Día Mundial de la Contraseña. Se celebra desde 2013, por iniciativa de Intel, cada primer jueves de mayo y pretende concienciar sobre el tema de la seguridad informática.
Es la excesiva simplicidad la que sigue haciendo la vida muy fácil a los ciberdelincuentes, especialmente cuando se utilizan las mismas contraseñas para acceder a múltiples servicios y apps. Según el último informe de la empresa Nordpass, todavía en 2022 la contraseña más popular en el mundo era «Password», mientras que en Italia la tendencia sigue siendo utilizar la secuencia «123456».
Y según se recoge en el último informe de Clusit, la Asociación Italiana para la Seguridad de la Información, hasta el 64% de los incidentes a nivel mundial son causados por acciones «torpes» de los usuarios. «Observamos que los ciberdelincuentes utilizan técnicas muy comunes y poco complicadas para hackear cuentas y apoderarse de datos e identidades digitales, lo que significa que, por otro lado, todavía no hemos aprendido a defendernos», afirma Alessio Pennasilico, del Comité Científico de Clusit. «A la luz de las tecnologías disponibles hoy en día, es necesario abandonar números, letras y caracteres especiales que puntualmente tenemos que resetear porque son difíciles de recordar, en favor de una autenticación segura, que puede incluir la autenticación multifactor a través de apps o la autenticación biométrica».
Fuente: Web. Editado por CambioDigital OnLine