RISC-V, la arquitectura de chips advenediza, ha dado un paso más en el mercado de los procesadores.
El gigante de los semiconductores Qualcomm ha anunciado hoy que está construyendo una plataforma de wearables basada en RISC-V para Wear OS, el sistema operativo de Google para smartwatches.
El sistema ampliará la gama de procesadores Snapdragon Wear de Qualcomm, que alimentan la mayor parte de los productos Wear OS.
Según Qualcomm, la nueva solución reducirá el tiempo de comercialización para los fabricantes de equipos originales (OEM) a la hora de lanzar smartwatches.
La compañía dijo en una entrevista que RISC-V ofrece ventajas tanto de rendimiento como de potencia para las plataformas wearables.
«Nuestras innovaciones en la plataforma Snapdragon Wear ayudarán al ecosistema Wear OS a evolucionar rápidamente y a agilizar el lanzamiento de nuevos dispositivos», declaró Dino Bekis, vicepresidente de Qualcomm.
La plataforma es otro impulso para RISC-V, que está haciendo cada vez más competencia a Arm, el diseñador de chips con sede en el Reino Unido. Los conjuntos de instrucciones de código abierto de RISC-V ofrecen una alternativa económica, eficiente y personalizable a los planos de Arm.
En agosto, cinco fabricantes de chips, entre ellos Qualcomm, anunciaron una nueva alianza para comercializar este nuevo competidor. Qualcomm ha sido uno de los principales clientes de Arm, pero ahora ambas empresas están inmersas en una batalla legal.
Las tensiones entre los socios surgieron durante la propuesta de adquisición de Nvidia. En mayo de 2022, el consejero delegado de Qualcomm dijo que quería comprar una participación en Arm, o incluso adquirirla directamente. Unos meses después, Arm demandó a Qualcomm. La demanda acusa a la empresa estadounidense de utilizar la propiedad intelectual de Arm sin permiso.
Qualcomm no es la única que alimenta la competencia de Arm. RISC-V, con sede en Suiza, también ha recibido elogios de Google. En diciembre, Lars Bergstrom, director de ingeniería de Android, pidió que la arquitectura se convirtiera en una «plataforma de nivel 1» del sistema operativo, al mismo nivel que Arm.
La colaboración en el campo de los wearables supone otro espaldarazo para RISC-V.
«Estamos encantados de ampliar nuestro trabajo con Qualcomm Technologies y sacar al mercado una solución RISC-V para dispositivos portátiles», afirma Bjorn Kilburn, Director General de Wear OS de Google.
En una noticia menos auspiciosa para RISC-V, un grupo de políticos estadounidenses quiere que la Casa Blanca restrinja a las empresas estadounidenses el trabajo con la tecnología de código abierto. Los legisladores han expresado su preocupación por el acceso de China a la tecnología.
El representante Mike Gallagher, presidente del Comité Selecto de la Cámara de Representantes sobre China, declaró a Reuters que el Departamento de Comercio debería «exigir a cualquier persona o empresa estadounidense que reciba una licencia de exportación antes de colaborar con entidades de la RPC (República Popular China) en la tecnología RISC-V».
En respuesta, el director general de RISC-V International advirtió de que las restricciones perjudicarían a la industria del chip.
«Las acciones contempladas por los gobiernos para una restricción sin precedentes en los estándares abiertos tendrán como consecuencia una disminución del acceso al mercado global de productos, soluciones y talento», escribió Calista Redmond, jefa de RISC-V International, en un blog la semana pasada. «La bifurcación a nivel de estándares conduciría a un mundo de soluciones incompatibles que duplican esfuerzos y cierran mercados».
Fuente WEB | Editado por CambioDigital OnLine