La confianza en la inteligencia artificial generativa (IA Gen) ha experimentado un notable aumento a nivel global, según el informe “IDC Data and AI Impact Report: The Trust Imperative”, encargado por SAS. El estudio, basado en una encuesta a 2.375 líderes de TI y negocios de diversas regiones del mundo, revela que casi la mitad de los participantes (48%) confía plenamente en la IA generativa, superando ampliamente a formas más tradicionales de IA como el aprendizaje automático, que solo recibe esa confianza de un 18% de los encuestados.
Este fenómeno plantea una paradoja: mientras la IA generativa —como ChatGPT— es percibida como más confiable, las inversiones en prácticas que aseguren su confiabilidad, como la gobernanza, la explicabilidad y las salvaguardas éticas, siguen siendo limitadas. Solo el 40% de las organizaciones encuestadas han destinado recursos a estas áreas, a pesar de que aquellas que sí lo hacen tienen un 60% más de probabilidades de duplicar el retorno de inversión (ROI) en sus proyectos de IA.
Kathy Lange, directora de investigación en IDC, advierte que la familiaridad social y la interacción humana que ofrece la IA generativa podrían estar influyendo en esta percepción de confianza, independientemente de su precisión o fiabilidad real. Esta desconexión entre la confianza percibida y la implementación de medidas responsables plantea riesgos éticos y operativos para las organizaciones.
El informe también destaca el surgimiento de nuevas tecnologías como la IA agente y la IA cuántica. Aunque aún en fases tempranas de desarrollo, estas tecnologías están ganando terreno en términos de confianza: un 33% de los encuestados confía plenamente en la IA agente, y un 26% en la IA cuántica, a pesar de que sus aplicaciones prácticas aún son limitadas.
Sin embargo, el estudio identifica obstáculos estructurales que dificultan el éxito de la IA en las organizaciones. Entre ellos se encuentran infraestructuras de datos débiles, falta de gobernanza adecuada y escasez de talento especializado. El 49% de los participantes señala que sus entornos de datos no están centralizados ni optimizados en la nube, mientras que el 44% menciona la ausencia de procesos sólidos de gobernanza de datos, y el 41% reporta una carencia de habilidades en IA dentro de sus equipos.
En este contexto, Bryan Harris, CTO de SAS, subraya la importancia de fortalecer la confianza en la IA no solo para mejorar los resultados empresariales, sino también para proteger a los empleados y a la sociedad en general. Según Harris, esto requiere aumentar la tasa de éxito de las implementaciones, fomentar la revisión crítica de los resultados por parte de humanos y empoderar a la fuerza laboral con herramientas de IA.
El informe completo está disponible en el sitio web de SAS, y sus hallazgos serán discutidos en un panel transmitido por LinkedIn Live, moderado por Nicholas Thompson, CEO de The Atlantic, con la participación de expertos de SAS, Deloitte e IDC
Fuente: comunicado de prensa SAS | Editado por CDOL