Un reciente estudio de Kaspersky ha puesto de manifiesto una consecuencia silenciosa pero devastadora de los ciberataques en América Latina: el daño a la reputación de las empresas. La investigación revela que el 25% de las organizaciones que sufrieron un incidente cibernético en los últimos dos años vieron afectada directamente su imagen. Este impacto va más allá del daño técnico, exponiendo fallas internas, debilitando alianzas estratégicas y comprometiendo la continuidad del negocio.
El costo invisible de la desconfianza
Aunque al principio el impacto reputacional pueda parecer intangible, se traduce rápidamente en desconfianza por parte del mercado. Incluso después de que una empresa restaura sus sistemas y operaciones, persisten las dudas sobre su capacidad para operar de forma segura. Un ciberataque no solo expone las vulnerabilidades técnicas, sino también la solidez de la infraestructura de seguridad, la continuidad de las operaciones y la protección que se ofrece a clientes, socios e inversionistas.
La investigación de Kaspersky destaca que el 41% de las brechas de seguridad tienen su origen en amenazas internas y prácticas cotidianas de los empleados. Acciones como descargar programas maliciosos, acceder a sitios web no seguros o responder a intentos de phishing abren la puerta a los ataques. Estos errores, lejos de ser incidentes aislados, pueden ser percibidos como una falta de inversión en capacitación y protocolos de ciberseguridad, lo que erosiona la credibilidad de la empresa.
Consecuencias tangibles en el negocio
Una vez comprometida la credibilidad, las consecuencias se materializan rápidamente. Los hallazgos del estudio muestran que el 16% de las empresas latinoamericanas afectadas por ciberataques han perdido la confianza de sus clientes. Además, otras han enfrentado el retiro de inversionistas (10%) y afectaciones económicas más amplias, como la cancelación de pedidos, la caída en el valor de las acciones o la ruptura de alianzas clave (10%).
La resiliencia digital como ventaja competitiva
A pesar de la profundidad del daño reputacional, no es irreversible. Las organizaciones que adoptan una postura proactiva, invierten en una cultura de ciberseguridad y responden con transparencia ante los incidentes pueden recuperar la confianza del mercado e incluso fortalecerla.
Daniela Álvarez de Lugo, Gerente General para la región Norte de Latinoamérica en Kaspersky, enfatiza que «la ciberseguridad ya no es solo una tarea del área de tecnología: es una pieza clave de la estrategia del negocio». Su impacto se extiende a la continuidad del negocio, la competitividad y la confianza del mercado. Adoptar un enfoque proactivo en seguridad digital, integrando la ciberseguridad desde el diseño y alineando su gestión con los objetivos corporativos, no solo reduce la exposición al riesgo, sino que genera ventajas sostenibles. En un entorno de amenazas constantes, la resiliencia digital es una ventaja competitiva, no un lujo.
Claves para mitigar el impacto reputacional de un ciberataque
Kaspersky comparte medidas esenciales para que las empresas reduzcan el daño a su reputación tras un incidente cibernético:
Prevenir es mejor que remediar: Implementar una estrategia de ciberseguridad preventiva que permita identificar, responder y neutralizar los ataques en sus primeras etapas, utilizando tecnologías como EDR, XDR o MDR.
Capacitar continuamente a los empleados: Desarrollar programas de concientización sobre riesgos digitales, como la ingeniería social o el phishing, y fomentar buenas prácticas para reducir significativamente la exposición a errores humanos.
Aprender del incidente e invertir en inteligencia de amenazas: Monitorear los riesgos emergentes y analizar lo ocurrido para anticiparse a futuros ataques y fortalecer la estrategia de defensa.
Diseñar un plan de respuesta ante incidentes: Contar con un protocolo claro para actuar con agilidad, contener el daño, minimizar el tiempo de inactividad y comunicar de manera asertiva con los públicos clave, evitando respuestas improvisadas.
Gestionar la comunicación con transparencia: Ante un incidente, informar de manera clara y oportuna a clientes, aliados, autoridades y medios de comunicación es crucial para contener el impacto reputacional.
Fuente: Kaspersky