Se trata de la última escalada en la encarnizada guerra de los chips entre Estados Unidos y China donde EE.UU. impide ventas de chips «estratégicos» al gigante asiático.
Las autoridades chinas iniciaron en marzo una revisión de los productos vendidos en el país por Micron, uno de los principales fabricantes de chips del mundo.
«La revisión reveló que los productos de Micron presentan graves riesgos para la seguridad de la red, lo que supone importantes riesgos para la seguridad de la cadena de suministro de infraestructuras de información críticas de China, que afectan a la seguridad nacional del país», declaró la Administración del Ciberespacio de China (CAC) en un comunicado.
«Los operadores de infraestructuras críticas de información en China deben dejar de comprar productos de Micron».
La amplia definición china de infraestructura de información crítica incluye sectores que van desde el transporte a la sanidad.
La CAC no dio detalles sobre qué riesgos había encontrado ni qué productos de Micron se verían afectados.
Micron dijo que había recibido la notificación de la CAC sobre la conclusión de su revisión de los productos de la empresa vendidos en China.
«Estamos evaluando la conclusión y valorando nuestros próximos pasos», añadió.
A la pregunta de si la empresa recurrirá la decisión, una portavoz de Micron respondió: «Esperamos seguir manteniendo conversaciones con las autoridades chinas».
Micron fabrica chips de memoria DRAM y NAND flash y compite con las surcoreanas Samsung Electronics y SK Hynix, así como con la japonesa Kioxia, una unidad de Toshiba Corp.
Alrededor del 10% de los 30.800 millones de dólares de ingresos anuales de Micron el año pasado procedieron de China, según datos de la empresa.
Pero una gran parte de los productos de Micron vendidos en el país fueron comprados por fabricantes extranjeros, habían dicho anteriormente los analistas, y no estaba claro si la decisión del organismo de control de la ciberseguridad afectaba a las ventas a compradores extranjeros.
Los analistas de Jefferies esperaban un impacto limitado en Micron, ya que sus principales clientes en China son empresas de electrónica de consumo, como fabricantes de teléfonos inteligentes y ordenadores, y no proveedores de infraestructuras.
«Dado que los productos DRAM y NAND de Micron están mucho menos presentes en los servidores, creemos que la mayor parte de sus ingresos en China no proceden de las telecos ni del Gobierno. Por lo tanto, el impacto final sobre Micron será bastante limitado», señalaron en una nota.
El momento del anuncio de la CAC se produjo durante la cumbre de los líderes del Grupo de los Siete (G7) en Japón en la que el Presidente de Estados Unidos, Joe Biden, declaró que los países del G7 habían acordado «reducir los riesgos y diversificar nuestra relación con China».
Por lo pronto Micron recientemente anunció un plan para invertir hasta 500.000 millones de yenes (3.700 millones de dólares) en Japón en tecnología ultravioleta extrema, convirtiéndose en el primer fabricante de chips que lleva esta avanzada tecnología de fabricación de chips al país, que ahora trata de revitalizar su sector de chips.
Fuente WEB | Editado por CambioDigital OnLine